Los Mayas expresaban el concepto de unidad en su saludo diario,
IN LAK'ECH, que significa "Yo soy otro tú", al que contestaban HALA
KEN, que significa, "Tú eres otro yo”
exactamente dos centímetros y medio “la distancia armoniosa que debe
haber entre el clítoris y la vagina”: incluso esa leve versión de la
volupté –la de tener razón– le fue negada en vida a la princesa Marie Bonaparte.
En el interior del sujeto se reproduce (y ustedes lo ven bien, no puede reproducirse más que a partir de una organización significante), el mismo modo de rapports que existen entre los sujetos. No podemos pensar —aunque lo digamos, que esto puede ir diciéndose— que el superyó es efectivamente algo severo que acecha ahí al Yo en un recodo, para infligirle atroces miserias. NO es una persona, funciona en el interior del sujeto, como un sujeto se comporta en relación a otro sujeto, y justamente en esto hay un rapport entre sujetos, que no implica por eso la existencia de otra persona. Bastan las condiciones introducidas por la existencia, el funcionamiento como tal del significante, para que los rapports intersubjetivos puedan establecerse.
Es de esta intersubjetividad en el interior de la persona viviente de lo que nos ocupamos en el análisis. (Lacan, semV: Las insignias del Ideal)
Es de esta intersubjetividad en el interior de la persona viviente de lo que nos ocupamos en el análisis. (Lacan, semV: Las insignias del Ideal)
jjajj jajaa Para Adorno la felicidad es la disolución del sujeto en el objeto.
[AC y MN, casa Guardia-Palomar; y planta alta casa Curuchet]
[AC y MN, casa Guardia-Palomar; y planta alta casa Curuchet]
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