Construcción: "Solamente el curso posterior del análisis nos faculta para decidir si nuestras construcciones son correctas o inútiles. No pretendemos que una construcción sea más que una conjetura que espera examen, confirmación o rechazo. No pretendemos estar en lo cierto, no exigimos una aceptación... ni discutimos una negación. En resumen, nos comportamos como una figura familiar en una de las farsas de Nestroy: el criado que sólo tiene una respuesta en sus labios para toda pregunta u objeción: «Todo se aclarará en el curso de los acontecimientos futuros.» http://mediacionartistica.files.wordpress.com/2013/01/construcciones-en-el-analisis.pdf

miércoles, 25 de mayo de 2011

autopsia & soberanía (resolvélo sipodés)[coxal]

Marin (Le portrait du roi) habla de autopsia, pero no de la operación con apertura violenta del cuerpo de un ser vivo-muerto... sino utiliza la palabra autopsia en su sentido original, el "ver por sí mismo", inspeccionar con los propios ojos. Esto es lo que qiere decir originariamente autopsia: la experiencia de ver con nuestros propios ojos y, por lo tanto, de poder dar testimonio de eso (...convirtiendo al narrador en un testigo, incluso un "mártir" -originariamente era lo mismo).
Pero a continuación, la autopsia pasó a designar, en griego, 2 sentidos que Marin tiene derecho a no tener en cuenta pero que nosotros, por nuestra parte, hemos de tomar en serio:
1- un sentido poco usual, el de participación en la omnipotencia de los dioses y un comercio íntimo con ellos;
2-un sentido vuelto corriente, incluso dominante, como una abreviación autorizada, aquel que utilizamos para designar la ceremonia de disección, la autopsia de un cadáver -un uso abusivo: habría que decir autopsia cadavérica. A mí lo que me divierte aquí,
suponiendo que me esté divirtiendo, en el juego virtual entre estos 2 sentidos es que, en la autopsia de un elefante frente a Louis XIV, ahí donde está la mirada del más grande de los reyes, del soberanísimo que ve el cadáver de la más grande de las bestias, cadáver que representa también al animal mortal que es uno de los cuerpos del rey, hay (en todos los sentidos) autopsia: este elefante muerto, condenado a muerte o respetado porque es el rey quien lo ha matado, también es un poco, en esa necropsia, la representación denegada, vagamente totémica del rey mortal, de una muerte del rey que todo el mundo teme y espera y que cualqier súbdito proyecta en la autopsia de la soberanía: el rey ha muerto, viva el Rey" (Derrida, La bestia y el soberano p.346) [B.McCullough y D.Firman: esculturas-elefantes apuntando en 2 senti2] http://www.pagina12.com.ar/diario/especiales/subnotas/168770-53785-2011-05-26.html

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