
Los efectos de las cenizas sobre la salud pueden ser divididos en síntomas respiratorios, oculares, irritación cutánea y efectos indirectos.
La ceniza es diferente del polvo que diariamente encontramos en la casa: su estructura cristalina es filosa y produce raspaduras, desgastando las superficies al limpiarlas frotando o
cepillando. También son dañinas para los vehículos. La lluvia puede ayudar a lavar a la ceniza de techos y demás superficies, pero también genera obstrucción y daños en desagotes pluviales, acumulación de ceniza en áreas deprimidas, entre otros problemas.
La ceniza humedecida aumenta a más del doble de su peso en seco y puede generar colapso de techos. Los depósitos de ceniza empapados pueden endurecerse formando costras que se adhieren mucho a las superficies, dificultando la limpieza y generando la obstrucción de cañerías, red de agua y alcantarillado de las calles.
No hay comentarios:
Publicar un comentario