Ya que estos días se camina bajo el aroma de los tilos florecidos: voy a ensayar una entrada más personal (ahora qe alguien qe no sé si espiaba mi blog ha dejado de espiarlo). En este semanario online fui coleccionando montajes alucinados de imágenes o citas -"citas salvadoras": encuentros fantásticos iluminados por la presumida chispa del choque, que se da o no se da, qe se ve o no se ve o no se entiende. No entender es una libertad difícil de asumir -en el "éxtasis de la comunicación" en que vivimos, debemos entender. La chispa se ve mejor con la visión periférica -como un mosqito, si uno qiere atraparla en la pupila se hace más evasiva, menos durable. Visión periférica o atención flotante: confundirse-asociar una película con otra, un cuadro con otro, una escena con otra: película-cuadro-escena: mismo concepto en distintas palabras: lo que vemos "en las cámaras de la mente" como prisioneros tras el cristal de seguridad de nuestros ojos. No significa nada que las cosas se parezcan -pero es lo único que significa. No es una purificación del de-a-2, o solo lo es precariamente, mostrativamente: porque el de-a-2 es abierto y se ramifica o rizomatiza (cada uno que elija la complejidad que qiera o pueda, pero no hinchen las pelotas con la superación de la metafísicabivalente que perdura ay!- "superación" que elijo no-entender: cuando se escribe, lo único verdaderamente importante es saber con qué otra máquina la máquina literaria puede ser conectada, y debe serlo para que funcione http://caosmosis.acracia.net/?cat=3)


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